La otra vida

Son las dos de la mañana. Tengo tanto sueño que no puedo dormir, el niño lleva casi toda la noche llorando y esta vez es mi turno. Janes sigue empeñada en ir a buscar la parejita en cuanto acabe los exámenes, como si uno no fuera bastante!, por ahora necesitamos apañarnos con esta casa, no podemos cambiar tan pronto a una con otra habitación, y si no acaba los exámenes, y se empeña en seguir con lo de esa beca, cualquiera bolsillo aguante otra casa y otra boca más.

Además tendría que ser concebido por esporas, o tener mejor puntería que Guillermo Tell porque esa es otra cosa, si unas veces no esta estresada con la llegada de los primeros exámenes es que está cansada por el niño, al final por H o por B: me la pelo como un mono. Y no es que yo no insista, porque a pesar de que ya no se cuida nada, y se le esta poniendo un culo y unas piernas de negra, pero de negra, de las gordas, pues a pesar de eso me sigue poniendo, Eso sí, vuelvo a la cruda realidad, cada vez que veo a las novias de mis cuñados, aun tienen las carnes prietas y son sobretodo alegres. Les encanta jugar a cualquier tipo de tontería en el jardín, en la piscina o bebiendo.

Volviendo al tema del que me quejaba: el sexo es ya, una cosa anecdótica del sábado por la noche, aunque las veces que estamos en Talavera, cada dos o tres semana, ni eso: no quiere hacerlo en casa de sus padres , aunque estén 2 plantas más abajo. Recuerdo los primeros años de noviazgo, cuando aprovechábamos cualquier momento en que nos separaban con un par de plantas de ellos y aprovechábamos para que me la comiera mientras yo vigilaba la escalera.

Cada día estoy más convencido, de que el peor de los temores se va a cumplir, el gen defectuoso, esta vez se ha transmitido directamente de madre a hija, sin pasar por Francia, Suiza, los antroposofistas, ni la madre que los parió.

Mi vida social se está reduciendo a la mínima expresión, algunos sábados que Janes no está medio dormida nos acercamos a ver a alguna pareja de amigos con bebé, aunque luego todo se reduce a que los tíos nos tomamos una o dos cervezas mientras ellas no paran de hablar de potitos, cremas y mierdas de todo tipo de texturas, olores y color.

¿El deporte? Já ya no se ni cómo se coge una raqueta, ni siquiera juego con el ordenador, y hasta estoy dejando la tele,por falta de tiempo, y para más INRI, la “hijueputa” de Marisolez no para de presionarme con indirectas para que me busque un segundo trabajo durante las pocas tardes que tengo libres y los sábados: su ideal sería que Janes deje todo trabajo que no este circunscrito a las cuatro paredes de la casa, pero que nuestro nivel adquisitivo sea el mismo o mejor. El último capricho, al cual de momento he logrado no ceder, es llevar al niño a ese colegio superexclusivo superprivado, y claro, supersupercaro , afín a su grupo religioso y en el que tan bien le va al nieto de su vecina.

Y bueno la última pena, este año tampoco salimos de vacaciones, el pasado fue el embarazo y este la edad del bebe, todo seria aceptable si la alternativa no pasara por ir a Talavera 15 días.

Cada día me doy cuenta que Janes me llena menos y que me aburro con ella, no puedo tener ninguna conversación de un nivel medio-alto de ningún tema, cómo disfrute hace meses en casa de mis amigos fumando esa cachimba de tabaco pakistani, se nos abrió la mente y casi arreglamos el mundo entre calada y calada. A veces siento que estoy perdiendo lo que queda de mi juventud.

Y aquí apareció él, no recuerdo cómo, pero ahí estaba ese elemental del agua en mi cuarto de baño, mirándome desde el grifo goteante “J, no tengo mucho poder”,dijo, pero algo puedo ayudarte, primero imagínate cómo serían algunos aspectos de tu vida ideales.

Recuerdo balbucear ideas inconexas al principio: recuperar los años perdidos, volver a sentirme joven, viajar a un montón de sitios que ni había pensado, conocer cada vez más gente, conocer a un montón de chicas guapas y con todo prieto a las que les encante follar, siempre me han gustado las guiris, porque no? O vivir en el centro de Madrid, en un ático, no espera en un loft, no espera en un ático, hacer nuevos amigos, tener las tardes y noches libres para ocio, tomar cañas o cenar con mi gente, o hasta con desconocidos, buscarme un hobby nuevo, no sé, la fotografía por ejemplo, enamorarme de nuevo de alguien, y que Ella me llene por completo, quiero tener ojos sólo para ella, que para mi sea el ser más extraordinario del mundo

“Bueno”- me dijo el elemental- “ya te he advertido que no soy poderoso, puedo hacerte recuperar 2 años, no más de tu juventud, conocerás chicas pero sufrirás también a veces por ellas, pero el balance te compensará. Conocerás gente y viajaras pero tienes que poner de tu parte. Sólo te voy a pedir una cosa, dentro justo de 2 años, acuérdate de mi, y escribe algo sobre esto una noche, fumándote una sisha especial y escuchando a Pink Floyd, nada de esto te parecerá coherente, lo sé pero es lo que tendrás que hacer, no le des más vueltas, entonces si cumples eso, te seguiré ayudando”.

Acepto le dije, sin pensármelo dos veces.

“Entonces, una ultima cosa,:lávate la cara, mírate al espejo, cierra los ojos y ábrelos muy, muy despacio...”

28 de Mayo de 2008, estoy frente al espejo del aseo del baño de un restaurante italiano, salgo y ahí esta Janes esperándome, con un rictus serio, agachando la mirada me dice: necesito tiempo....